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Cloud y sus beneficios para el medioambiente

En las últimas décadas la tecnología ha avanzado a pasos agigantados y tanto la sociedad como la industria han tenido que adaptarse a los constantes cambios generados por la ciencia. Una de las últimas novedades que ha impactado en el mundo de los negocios y la comunicación es el uso de la nube o cloud. La computación Cloud implica que todos los procesos de almacenaje y manejo de datos se lleven a cabo mediante servidores remotos que permiten que los usuarios accedan al sistema desde cualquier lado y en cualquier momento de manera segura.
La implementación del Cloud en los negocios permite desplegar aplicaciones más rápido y responder a los cambios del mercado de manera más eficiente que del modo tradicional. Esta mejora en el sector IT logra que las empresas puedan cumplir con la demanda de los clientes y, consecuentemente, obtener un notable crecimiento en las ventas. Además, la computación Cloud fue una aliada fundamental para las compañías durante la pandemia ya que permitió que las personas continuaran trabajando desde sus hogares sin poner en riesgo su salud.
En adición de las ventajas ya mencionadas, existe otro aspecto extremadamente positivo para la sociedad del que poco se habla. La implementación del Cloud en las empresas ayuda de manera significativa al cuidado del medioambiente. Un claro ejemplo de esto es la compañía Microsoft la cual ha disminuido en un 98% las emisiones de carbono respecto a las generadas con el centro de datos on-site.
Estos son los cinco beneficios más relevantes de la implementación Cloud en relación con el medioambiente:
Reducción del uso energético: los centros de datos on-site requieren una alta demanda de energía para el mantenimiento del equipamiento. De acuerdo con The National Renewable Energy Laboraotry, el 1.8% del consumo de energía anual de Estados Unidos corresponde a los centros de datos. Afortunadamente, el uso de Cloud reduce el uso energético al 87% lo que implica un ahorro de costos energéticos entre el 60 y el 85%.
Disminución de emisión de gases: de acuerdo a un estudio creado por Accenture, Microsoft y WSP, el uso de Cloud puede reducir al 30% la huella de carbono por usuario. En el año 2010, la compañía estadounidense de cloud Salesforce redujo 170.900 toneladas de emisión de gases, equivalente a eliminar 37 mil automóviles en circulación.
Uso de energía renovable: los centros de datos Cloud han comenzado a utilizar energía renovable como la energía solar, geotermal y eólica.
Desmaterialización: la desmaterialización se refiere a reemplazar productos físicos con equivalentes virtuales. Al migrar a la nube, las personas utilizan menos máquinas y, en consecuencia, hay una reducción en el uso de energía y de emisión de gases. Además, las empresas que optaron por migrar al Cloud también lograron reducir el uso de papeles.
Eficiencia: el uso de Cloud permite tener mayor eficiencia en el uso de tecnología y en el desarrollo de actividades. Gracias a la migración, las empresas maximizan el uso de recursos y necesitan menos energía para su funcionamiento.
La implementación Cloud en las empresas ha revolucionado la industria ya que ha permitido un proceso interno mucho más veloz y eficiente, ha mejorado la experiencia de los clientes y, como si todo esto fuera poco, también ha contribuido al cuidado del medioambiente. Aunque los datos expuestos son completamente alentadores, las compañías Cloud siguen en la búsqueda de mejores resultados en relación al avance tecnológico y el cuidado del medioambiente.

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